[El informe Goldstone, publicado oficialmente en septiembre, desea que de aquí a seis meses (a no ser que los israelíes implementen encuestas sobre sus crímenes de guerra en Gaza), la asamblea General de Naciones Unidas y el Consejo de Seguridad trasmitan el caso a la corte penal internacional de La Haya ; desde que salió el informe, los israelíes anuncian que USA promete vetarlo]
El voto ruso para respaldar el informe Goldstone sobre Gaza en el Consejo de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el viernes pasado, ha sido algo muy importante, tanto para Palestina como para Rusia. Para Palestina, este voto abrió el camino para perseguir y juzgar a los asesinos de masa israelíes, y por lo tanto esto le abre a Rusia una nueva era de responsabilidad después de un largo período en que sólo valía la ley del Oeste, la ley del Colt 45. Para Rusia, este voto significa una demostración ante la población y ante el mundo entero de que ya se ha liberado del diktat Usiano y sionista, y de que ya controla el timón de su propia diplomacia.
Todo empezó en la Navidad pasada, cuando Israel se abalanzó a carnear la indefensa Gaza. Aprovechando la pausa en torno a la fecha sagrada, el ejército israelí masacró a cientos de niños palestinos y otros civiles, con el uso indiscriminado de fósforo blanco y artillería. El mundo estaba espantado, y el juez Richard Goldstone, a cargo del Consejo para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que antes había sido fiscal para los crímenes de Guerra en Yugoslavia y Rwanda, fue nombrado para investigar los hechos. Muchos dudaron de su imparcialidad, pues Goldstone es un judío, que se describe a sí mismo como sionista, vinculado a israel, ya que figura entre los profesores de la universidad israelí, y su hija, incluso, vivió en Tel Aviv un tiempo.
Goldstone se dejó guiar por su conciencia, no por su linaje. Fue a Gaza, invirtió mucho tiempo y esfuerzo allí, y concluyó: Israel ha cometido crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. Recomendó que se transfiriera el caso a la Corte Penal Internacional de La Haya. Israel no cooperó y trató de desacreditar el informe y bloquearlo, pero no pudo. Y ésta ha sido la primera derrota israelí.
La segunda derrota ocurrió unos días más tarde. El dirigente del Fatah, que manda en Ramala, Mahmad Abbas, está dispuesto a hacer cualquier cosa con tal de permanecer en el poder después de su derrota electoral. Netanyahyu lo sabe y lo retó, quitándole la frecuencia para un segundo proveedor de telefonía móvil, y en el acto Abbas llamó a su representante en Ginebra para que le diera largas al informe Goldstone. Pero el pueblo estaba indignado, cundía el furor, lo llamaban traidor a Abbas, y cosas peores. Frente a la revuelta y a lo que iba a ser el fin de su autoridad política, Abbas volvió a dar un giro de 180 °, y dio la orden a su embajador de tratar el informe Goldstone con la mayor urgencia. Entonces, Bibi (Netanyahu) socavó su autoridad, le negó legitimidad a su agente Abbas; pero el informe fue abriéndose camino hasta el consejo de Naciones Unidas, y ésta ha sido la segunda derrota israelí.
Israel estallaba de rabia, al ver el nuevo giro. El Estado judío se consideraba invulnerable tras su triple defensa, que consta de la Sexta Flota, el Senado USiano y el Museo del Holocausto. El suave pedido del presidente Obama, de que se le pusiera un freno a la construcción para los colonos, los israelíes lo tomaron como una ofensa. Peor aún, los sionistas declararon la temporada de caza abierta contra Obama, y arremetieron contra su reforma de la salud en USA. Quedó en ridículo, y tanto Ehud Barak como Bibi Netanyahu dieron una aceleración a los proyectos de construcción, en Cisjordania como en Jerusalén Oriental, para demostrar que no les importaba un comino el pedido de Obama. Y ahora, resulta que de pronto, los ministros judíos del Estado van a ser juzgados como si fueran simples serbios o sudaneses.
Entonces los dirigentes israelíes activaron sur principales fuerzas de reserva, el Departamento de Estado y el Lobby, en USA. Unos días atrás, hablé con Martín Indyk, que fue anteriormente embajador de USA en Tel Aviv, y me confirmó que el Departamento de Estado hará lo posible para detener el informe antes de que llegue hasta Consejo de Seguridad, porque según él, “otro veto americano se vería feo. Además, si Obama se siente insultado y dolido, es capaz de olvidarse, sencillamente, vetar una resolución opuesta a Israel”…. [cada uno de los cinco miembros del Consejo de Seguridad tiene derecho a vetar una resolución de la ONU; hasta ahora, USA ha bloqueado todas los que eran hostiles a Israel].
Entonces Israel empezó a cortejar a Rusia, con la esperanza de establecer puentes y alistar al gobierno de Moscú en favor de su causa. Avigdor Lieberman, el ministro de Asuntos Extranjeros israelí pero nacido en la Moldova, tuvo diez encuentros con su contraparte, el ruso Serguei Lavrov; Netanyahu voló a Moscú en “misión secreta” para unas conversaciones con Medvedev, y el presidente Shimon Peres tuvo un encuentro con Medvedev en Sochi. Querían conseguir el apoyo ruso para sanciones contra Irán y para echar tierra sobre el informe Goldstone.
Les dijeron a los rusos que esto iba a crear un precedente peligroso: si hoy juzgan a los ministros y generales israelíes por lo de Gaza, mañana jugarán a ministros y generales rusos por lo de Chechenia. Pero es una comparación falsa: los chechenos son ciudadanos rusos con plenos derechos, mientras que los habitantes de Gaza no tienen derecho alguno. Más aún, los precedentes ya existen desde hace tiempo, cuando el serbio Milosevic fue llevado a juicio en La Haya. De lo que se trata es de saber si los judíos están pon encima de la ley, ésta es la novedad del caso.
Los observadores israelíes estaban seguros de que Rusia estaría a su lado. Existe un comercio pequeño pero provechoso entre los dos países; hay una comunidad de inmigrantes rusos en Israel, y hay muchas relaciones bilaterales. Por otra parte, Rusia tiene intereses tradicionales en Tierra Santa, y cientos de miles de peregrinos rusos hacen el viaje al Santo Sepulcro. Y además, le interesaba a Rusia hospedar la Conferencia de paz sobre el Medio Oriente, en continuidad directa con la conferencia de Madrid en 1989.
También hay un poderoso lobby sionista en Moscú. Es cierto, algunos de los más impresentables oligarcas están fuera, algunos en cárceles siberianas, otros en Tel Aviv o Londres. El poder está ahora concentrado en las manos de Putin y Medvedev, y se le tiene respeto al dinero, pero sin más. Pero hay muchos judíos ricos muy adinerados a los cuales les encanta jugar la carta del lobby judío. Uno de ellos es un patrón de televisión, bullicioso, famoso por su estilo de vida gay, multimillonario y jefe del comité para la cultura en el parlamento ruso, llamado Boris Spiegel. Durante su visita a Israel, prometió financiar la defensa de los criminales de guerra israelíes porque se siente con Israel “uña y carne, de su propia sangre”.
Posiblemente haya presumido de su poder. En una mesa redonda en torno al Oriente Medio, muy tumultuosa, con los diplomáticos rusos, todo el mundo se escandalizó al enterarse de la declaración de Spiegel. Gracias a Dios, Rusia no es una democracia parlamentaria al estilo occidental, y no son los judíos ricos los que la gobiernan.
Otros argumentos del lobby sionista para respaldar a Israel eran más sospechosos aún. Dijeron que Rusia debía estar eternamente agradecida a Israel porque había autorizado a algunas esposas rusas a salir de Gaza justo antes de que les bombardearan sus hogares, hasta hacerlos cenizas. El que se trague esto último, entonces también se tragará su argumentación para que los rusos apoyen un bombardeo “de represalias” contra Irán: porque en 1836 (sic), los persas habían linchado al diplomático y escritor Alexader Griboyedov, que se había colado en un harén, y había sido arrestado.
Pues bien, los rusos despreciaron las aberturas USianas e israelíes, y votaron a favor del informe Goldstone. Sus tres aliados se le unieron: China, India y Brasil, que representan entre los tres la parte del león en cuanto a recursos para la humanidad, petróleo, industria, y por lo visto conciencia también. Estos países están libres del diktat sionista. No buscan el provecho y la ganancia, sino que hacen lo que es correcto y benévolo.
Cuentan que el sabio chino Mencius (o Megzi, 372-289 antes de Jesucristo) fue a visitar al rey Hui, quien le dijo: “Anciano, ya que has tenido la osadía de andar mil leguas para venir hasta aquí, debes saber cómo puedo aumentar las ganancias provechosas para mi Estado”. Y contestó Mencius: “ ¿Por qué siempre estás hablando de ganancia? Lo que importa es la bondad y la rectitud. Si el rey dice ‘¿cómo aumentar ganancias para mi país?’ los altos oficiales van a decir: ‘¿cómo podemos aumentar las ganancias de nuestros feudos?’; entonces los intelectuales y la gente común van a decir: ‘¿cómo aumentar nuestras propias ganancias?’ Y si las clases altas y bajas luchan para aumentar sus ganancias a costa de las demás, el Estado estará en peligro.”
Por lo visto, el gran territorio que componen Rusia, China e India prefiere la benevolencia y la rectitud, mientras el mundo angloamericano prefiere el ardid para la ganancia. Por esto es que los sionistas lograron sobornar a los últimos, mientras que los primeros se han mantenido libres.
Los dirigentes rusos Putin y Medvedev hablaron muy claro en sus objeciones a los planes israelíes de atacar a Irán. Hablaron contra las sanciones también, y China les dio su pleno apoyo. Al mismo tiempo, Turquía se negó a dejar que las fuerzas aéreas israelíes se unieran a sus maniobras conjuntas con USA. Entonces, en el acto, los Estados Unidos timoneados por los sionistas se retiraron de las maniobras. La posición de Turquía es extremadamente relevante: se trata del viejo poder imperial que protegió y controló al Medio Oriente durante siglos. Turquía, formando bloque con Rusia y Grecia, es el principal heredero de Bizancio. Si queremos ayudar a Turquía en la defensa de la causa palestina, no debemos dejar a los sionistas jugar contra los turcos la carta de Armenia ahora. Cuando Turquía se une a Rusia y China, entre los tres tienen un peso bastante decisivo. De hecho, ya han puesto un freno a la noción de impunidad israelí.
Es imposible sobreestimar la importancia del voto ruso:
1. Este voto confirmó el principio de la igualdad. Todos los seres humanos son iguales. Si la Corte Internacional puede juzgar a Milosevic tanto como a burundianos y sudaneses, también puede juzgar a jueces y ministros judíos.
2. Este voto demostró que Rusia es independiente, no sólo de Washington, sino también de Tel Aviv. El lobby sionista en Rusia es poderoso, pero no omnipotente.
3. Este voto salvó a innumerables niños, mujeres y hombres de la muerte. Después de esto voto, un general israelí se lo pensará dos veces antes de largar sus bombas sobre objetivos civiles. Lo cual también salvará a los niños israelíes de las represalias.
4. Rusia ha recobrado su posición perdida por obra de Gorbachev y Yeltsin. Rusia es nuevamente un faro para el mundo libre, me refiero al mundo libre de bases Usianas. La posición de Moscú ha sido decisiva para orientar la posición china también.
5. Parece que el arma mayor de los sionistas, es decir su habitual griterío, está fuera de uso. En otros tiempos ellos podían convencer a individuos y naciones tan fácilmente como unas sirenas por el embrujo de sus argumentos persuasivos. Hoy en día la bruja de Sión ha perdido sus encantos.
Hace algunos años, escribía yo que “el mundo necesita a Rusia, pues desde que palideció su estrella en 1990, durante casi veinte años el tren descarrilado de USA y los criterios morales blandos de Israel hicieron estragos en el planeta. Rusia debe detener su orgía de agresiones y regresar a su lugar, que es el de último protector de los débiles y desvalidos. Este es el destino manifiesto de Rusia.”
El voto de Génova demostró que Rusia acaba de encarnar nuevamente este destino. Debemos una vez más vincular nuestras esperanzas con Rusia y su amistad con China. Entre los dos, también pueden impedir a Israel que siga lastimándose y haciendo daño a los demás. Tanta gente en USA y en Francia, en Egipto y en Palestina está harta de la intransigencia israelí, de su egotismo, su hipocresía y su impunidad. Por esto es que cuajó tanta esperanza en Barack Obama después de su discurso del Cairo. Obama prometió recortar las pretensiones israelíes a las dimensiones de su pequeño Estado, pero desde entonces, Israel le ha venido cortándole a él las alas drásticamente. Por esto es que USA se está yendo a pique exactamente como el Titanic, pues recibió el impacto del lobby como un enorme iceberg invisible hasta entonces, y los brujos financieros ya le han quitado toda posibilidad de defenderse.
Ahora se viene Rusia, recibiendo una tremenda presión de parte de USA y otros grupos y Estados manejados por los sionistas. Deberíamos rezar para que resista los embates, y logre mantener su dignidad y la dignidad nuestra.
Traducción: Maria Poumier